¿Por qué ya no encuentro mi café favorito?
Descubre el mundo del café de temporada
Si alguna vez te has encontrado buscando ese café que tanto te gustó, pero ya no está disponible, no es porque se haya acabado sin más. Es porque en el mundo del café de especialidad, trabajamos en armonía con la naturaleza.
El café no “se termina” porque sí: cambia con las estaciones. Cada lote se cultiva, cosecha y tuesta siguiendo el ritmo natural de su origen. En otras palabras, el café de especialidad se planta y cosecha en sincronía con las temporadas de su región, respetando sus ciclos climáticos, suelos y tiempos de maduración.
Este enfoque forma parte de una filosofía de producción ética, sostenible y profundamente conectada con el origen.
¿Qué es un café de temporada?
Así como las frutas o las verduras tienen su mejor momento del año, el café también lo tiene. Los granos se recolectan cuando alcanzan su punto óptimo de maduración, lo que garantiza una mayor concentración de azúcares, acidez balanceada y un perfil sensorial mucho más expresivo.
Cada cosecha es distinta: incluso si el origen y la variedad se repiten, factores como el clima, la altitud, o el método de procesamiento hacen que cada lote tenga su propia identidad, aunque vengan de la misma finca.
Beneficios del café de temporada
Trabajar con cafés de temporada tiene múltiples ventajas tanto para el planeta como para quien los disfruta en taza:
- Mejora la salud del suelo: Respetar los ciclos naturales permite regenerar los nutrientes del terreno sin necesidad de sobreexplotarlo.
- Promueve la biodiversidad: Fomentar prácticas agrícolas estacionales ayuda a preservar ecosistemas más equilibrados.
- Apoya prácticas agrícolas responsables: Los productores pueden trabajar sin presiones artificiales de cosechas constantes, lo que mejora las condiciones laborales y la calidad del producto.
- Potencia el perfil de sabor: Al cosechar en su punto justo, los granos expresan con mayor claridad sus notas de cata, lo que se traduce en cafés complejos y vibrantes.
- Reduce el impacto ambiental: Menos uso de insumos industriales, menor huella hídrica y más eficiencia en la cadena de valor.
- Fomenta una conexión más profunda con el origen: Como consumidor, te haces parte de una historia más amplia: la del productor, la tierra y la cultura cafetera local, conociendo toda su trazabilidad.
¿Y qué hago cuando se acaba mi café favorito?
Que un café desaparezca del catálogo, al final es una oportunidad para explorar nuevos orígenes y perfiles. Si quieres encontrar uno similar al que te encantó, puedes guiarte por estos cuatro pilares:
Origen
La región donde se cultiva un café define muchos aspectos de su perfil: por ejemplo, los cafés etíopes suelen ser florales y afrutados, mientras que los colombianos tienden a ser más equilibrados y dulces.
Proceso
Natural, lavado o honey, entre otros: el método de beneficio transforma el sabor. Los naturales suelen ser más intensos y afrutados; los lavados, más limpios y brillantes; los honey combinan dulzor y cuerpo.
Notas de cata
Presta atención a las descripciones sensoriales. ¿Te gustaban esas notas a frutos rojos, a chocolate, a cítricos? Puedes buscar cafés con perfiles parecidos, incluso de otros orígenes.
Tipo de tueste
Mira si ese café que te gustó está tostado para filtro, espresso u omni. Cada uno resalta diferentes características del grano, y elegir el tueste adecuado es clave para disfrutarlo al máximo.
Descubre tu nuevo café favorito
Cada café es una historia. Cuando uno se va, otro está por llegar, con nuevos matices, aromas y sorpresas. Parte de la magia del café de especialidad es precisamente eso: su dinamismo, su conexión con la tierra y el hecho de que nunca va a ser igual.