El continente americano es una de las cunas del café de especialidad: de centro a sur, cada región ofrece una identidad única, marcada por sus paisajes, comunidades y tradiciones. Tres Américas reúne tres orígenes —El Salvador, Costa Rica y Nicaragua— que reflejan la riqueza cafetalera de este vasto territorio.

Desde El Salvador llega Valle de Oro, un natural cultivado a 1.050 metros por la familia Villavicencio, que trabaja con la variedad Marsellesa bajo prácticas sostenibles e innovadoras. Su perfil expresa dulzor y claridad, con notas de chocolate, ciruela pasa, naranja y un sutil toque floral a hibisco; acidez media-ligera y cuerpo medio que se integran en una taza equilibrada y envolvente, reafirmada por su consistencia y una puntuación de 85.

Marespi Crema, originario de la región de Brunca en el sur de Costa Rica, es fruto del legado cafetalero de la familia Marín Espinoza y su compromiso con la sostenibilidad y la calidad. Cultivado entre 1.500 y 1.900 metros, este café Catuai y Caturra, de proceso semi-lavado, ofrece una taza equilibrada y sedosa con notas de chocolate con leche, praliné, frutos rojos y cítricos. Refleja la armonía entre tradición, innovación y el alma del sur costarricense.

Desde Jinotega, Nicaragua, llega Papagayo, cultivado en la Finca San José por Lorenzo Efraín Siles Palacios. Producido a partir de Catimor, Parainema y Red Catuai, este lote lavado ofrece una taza suave y achocolatada, con matices de chocolate, nuez, uva y azúcar moreno.

Tres cafés, tres países y una misma experiencia: descubrir cómo la diversidad de suelos, altitudes y tradiciones en las Américas se traduce en perfiles que van de lo limpio y brillante a lo dulce y achocolatado, siempre con el sello de la calidad y la sostenibilidad en origen.

Este pack incluye:

• Valle de Oro (El Salvador) – 250 g

• Marespi Crema (Costa Rica) – 250 g

• Papagayo (Nicaragua) – 250 g