Jorco Lobos: Más que café, un renacimiento en cada taza
Jorco Lobos: Más que café, un renacimiento en cada taza
12/02/2024

En las exuberantes colinas de Tarrazú, Costa Rica, emerge nuestro nuevo café: Jorco Lobos. Este café, alimentado por un suelo fértil y por fuentes de aguas naturales, no solo deleita los sentidos, sino que también cuenta una historia de resiliencia, dedicación y sostenibilidad que refleja la esencia misma de la cultura cafetalera costarricense.

Conoce toda la historia detrás de este café a continuación. 

Explorando Jorco Lobos

El nombre "Lobos" fue elegido por los antiguos propietarios de la finca en honor a su éxito en la Copa de la Excelencia en 2008. Situada a una altitud de 1650 metros sobre el nivel del mar, la finca Río Jorco se beneficia de un clima único que favorece el cultivo del café Catuai, conocido por su resistencia y calidad.

Este café es capaz de reflejar en cada taza la riqueza de las tierras altas de Costa Rica. Gracias a su cultivo a más de 1600 metros sobre el nivel del mar, Jorco Lobos presume de una puntuación en cata de 86, este café se destaca por su excepcional calidad y complejidad de sabores. 

Desde el primer sorbo, se hacen evidentes las notas de: 

  • Granada, que garantiza una experiencia exótica.
  • Compota de pera con sus sutiles matices. 
  • Toffee para reforzar el trasfondo dulce.
  • Chocolate, un ingrediente indispensable en los cafés de especialidad centroamericanos. 

Cada sorbo es una experiencia única que revela nuevas capas de sabor y aroma, invitando a explorar y descubrir todos los matices que este café tiene para ofrecer.

Más allá del sabor, Jorco Lobos destaca también por su cuerpo medio y envolvente que deja una sensación de satisfacción duradera. Esta sensación se complementa con la acidez equilibrada que añade un toque vibrante y estimulante a cada taza. 

El arte del procesamiento

Río Jorco es conocido por su clásico proceso de semilavado que llevan haciendo por años, demostrando que las prácticas de la “vieja escuela” siguen siendo provechosas. 

Todo empieza con trabajadores bien formados y fiables que recogen las cerezas en el momento de maduración óptimo. Una vez recogidos y medidos todos los frutos, el equipo transporta el café para ser procesado. A la mañana siguiente, tras una ligera fermentación, las cerezas se pasan por un despulpador y se introducen en un gran sifón para que fermente en seco durante el resto del día. 

Por la noche, se cubre el pergamino con agua fresca y se deja fermentar bajo el agua hasta el día siguiente, cuando se moverá enérgicamente el pergamino en el agua para desprender todo el mucílago posible de la piel. Se vuelve a llenar el sifón con agua fresca, para un último aclarado que garantice que el pergamino está libre de mucílago. 

A continuación, se lleva el café a los patios para una fase de presecado al sol en una capa de grosor medio, moviéndolo cada dos horas. Por último, el pergamino se traslada a unos secadores mecánicos llamados "guardiolas'' cuando alcanzan un determinado contenido de humedad. 

Prácticas que garantizan la mayor calidad

Nuestro nuevo café también se beneficia del clima propio de las colinas costarricenses. Las plantaciones reciben mucho sol por la mañana y mucha nubosidad y lluvia por las tardes y noches, enriqueciendo el resultado final. 

Por otro lado, la gestión de las granjas también es de suma importancia. La familia ha ido renovando las granjas desde que se hizo cargo de ellas y practica técnicas sólidas y respetuosas con el medio ambiente para combatir las enfermedades y promover plantas sanas.

El legado de Río Jorco

La historia de Jorco Lobos se entrelaza con la historia de Río Jorco, una finca y molino con una larga tradición en la producción de café en la región de Tarrazú. Después de enfrentar dificultades financieras, la finca encontró un nuevo propietario en Carlos Castro, un apasionado agricultor y filántropo dedicado a revitalizar la comunidad circundante.

Con la ayuda de su familia y su equipo, Carlos Castro transformó Río Jorco en un modelo de sostenibilidad y excelencia en la producción de café. Desde la renovación de las plantaciones hasta la implementación de prácticas agrícolas respetuosas con el medio ambiente, la finca se ha convertido en un faro de esperanza y progreso para la comunidad.

Compromiso social y ambiental

Además de producir café de alta calidad, Río Jorco se compromete a mejorar la vida de las personas y proteger el entorno natural que lo rodea. A través de iniciativas de responsabilidad social y ambiental, la finca contribuye al desarrollo sostenible de la comunidad y promueve prácticas agrícolas que respetan el medio ambiente.

Descubre Jorco Lobos

Con Jorco Lobos, te invitamos a descubrir una nueva dimensión del café costarricense. Cada taza es un tributo a la dedicación de los agricultores, la belleza de la naturaleza y el espíritu indomable de Costa Rica. Únete a nosotros en este viaje de descubrimiento y disfruta del renacimiento en cada taza de Jorco Lobos.