A veces el café de especialidad y sus métodos de preparación pueden parecer un poco complicados, pero en verdad son más sencillos de lo que imaginas. Es por eso que hoy queremos presentarte una opción clásica y diferente para preparar un buen café en casa.

LA CIENCIA Y EL ARTE DE UN BUEN CAFÉ 

La Chemex es un aparato de extracción clásico y elegante que fue diseñado por el químico alemán Peter J. Schlumbohm -sí, ¡un químico!- con el fin de crear una cafetera especial. 

Su inspiración viene de dos utensilios de laboratorio: un embudo de vidrio y una Matraz de Erlenmeyer, a los que les agregó un mango de madera resistente al calor para hacer una cafetera más estética y chic que se alejara del ámbito científico y se acercara más a las cafeterías y al consumo general. 

Y ¡voilà! Así nació un diseño atemporal que se viene produciendo desde 1941 y que incluso hace parte de colecciones permanentes en algunos importantes museos como el MoMA en Nueva York.  

Este es un método de goteo, lo cual significa que el agua pasa a través de una capa de café y un filtro normalmente hecho de papel. En comparación con una prensa francesa, la Chemex te brinda una taza increíblemente limpia, ya que sus filtros de papel son entre un 20% o 30% más pesados que los demás, de modo que los sólidos no puedan atravesarlo, pero reteniendo más de los aceites suspendidos durante el proceso de extracción.

1, 2, 3, ¡LISTOS PARA EMPEZAR!

• El café de especialidad siempre será el elemento principal. Para este método deberá estar molido a un grueso medio para que no obture los filtros, pero que este lo suficientemente fino como para que el agua pueda penetrar bien en él y luego arrastrar los aceites hacia el fondo de la cafetera.

• El filtro siempre va a ser un filtro específico de la marca chemex, aunque podemos encontrar sustitutos en el mercado de marca blanca. Se trata de filtros gruesos que retienen los materiales o las partículas, pero que dejan pasar los aceites esenciales a la taza.

• En cuanto a la temperatura del agua, siempre debe estar por debajo de la temperatura de ebullición, lo ideal es entre 80 y 92°.

Con estos tres elementos podemos hacer un buen café en este tipo de cafetera que aprovecha especialmente todos aquellos matices que no se logran con otros métodos, por lo cual es especialmente interesante utilizar en estos casos un buen café de especialidad con denominación de origen.

UN NUEVO RITUAL PARA PROBAR EN CASA

La elaboración de café en este tipo de cafeteras es todo un ritual que se lleva a cabo en unos simples pasos:

• En primer lugar se coloca el filtro en la apertura superior de la cafetera, totalmente abierto para que se pueda verter un poco de agua caliente sobre él.

• Sobre el filtro se añade la medida recomendada de 15 ml de agua por cada gramo de café, es decir: por cada 150 ml de agua utilizaremos 10 gr de café (medida estándar de los medidores de café para grano de molienda media).

• Se deja el café sobre el filtro mojado y posteriormente se va añadiendo el agua caliente -entre los 80 y los 92 °C- siempre haciendo círculos.

• Se repite la operación con intervalos de 20 segundos entre cada círculo que se realice. El agua irá cayendo por goteo al fondo del recipiente por efecto de la gravedad.

• Cuando se tenga todo el café completamente mojado se deberá esperar a que termine el goteo.

• Una vez que se detenga el goteo se retira el filtro con el café húmedo.

• Para finalizar se agarra la cafetera por el cuello de madera y se sirve el café.

LO BUENO -NO- SIEMPRE SE HACE ESPERAR

Puedes estar acostumbrado a preparaciones rápidas, o pensar que hacer café en Chemex te tomará más tiempo, cuando en verdad te llevará de 3 a 5 minutos, el mismo tiempo que te tardaste en leer este blog.

Esperamos que te animes a intentar nuevas preparaciones y a comprobar cómo un mismo grano puede dar como resultado infusiones tan diferentes según la cafetera que uses.