Innovación y Legado en el Café de Especialidad Salvadoreño
En el mundo del café, hay historias que trascienden el simple acto de preparar una taza. Este es el caso de Valle de Oro, una finca en El Salvador que ha sido testigo de la evolución y el esfuerzo de generaciones dedicadas a la caficultura. En una reciente conversación entre Rodrigo, Head of Coffee de Syra Coffee, y Miguel Antonio Villavicencio, productor de café de MAV Coffee, se revelaron detalles fascinantes sobre el camino que ha recorrido esta finca para convertirse en un modelo de sostenibilidad y calidad.
El Legado del Café en El Salvador
La historia de Valle de Oro comenzó en 2012, cuando Miguel y su familia decidieron comprar la finca de Don Roberto Trabanino. En aquel entonces, la finca ya era un ejemplo de organización y cuidado, características que inspiraron a sus nuevos dueños a seguir un enfoque innovador en el cultivo del café.
Este enfoque se sustenta en técnicas agroforestales y en la implementación de variedades resistentes a la roya, una enfermedad que afecta los cultivos de café en muchas partes de América Latina. Todo con el objetivo de enfrentar los desafíos del cambio climático y preservar el legado cultural del café en El Salvador.
La Transición Hacia la Sostenibilidad
Uno de los aspectos más destacados de la finca es su manejo por surcos, lo que permite una regeneración constante de los árboles y garantiza una producción estable de café. Este método, lejos de ser convencional, ha demostrado ser eficaz para mantener la calidad y la sostenibilidad del cultivo. Además, la finca ha implementado técnicas agroforestales, lo que fomenta la biodiversidad al introducir árboles frutales nativos y permitir que los trabajadores cultiven maíz y frijoles, beneficiando tanto al suelo como a las familias que dependen de él.
En el ámbito de la producción, Valle de Oro se distingue por su diversidad de procesos, desde el café Lavado hasta el Natural y el Honey. Cada uno de estos métodos ofrece una experiencia sensorial única, respetando siempre los principios de calidad y sostenibilidad que guían a la finca.
Desafíos y Oportunidades
Miguel comparte que uno de los mayores desafíos actuales es el impacto del cambio climático y los costos crecientes de los insumos agrícolas. Sin embargo, la finca ha demostrado ser resiliente, adaptándose a nuevas variedades de café y buscando constantemente formas innovadoras de mejorar la calidad del suelo y la producción.
Uno de los enfoques clave ha sido mejorar el control de calidad en cada etapa del proceso, desde la cosecha hasta el secado y la exportación. Este enfoque proactivo y consciente no solo garantiza la viabilidad económica de la finca, sino que también contribuye al bienestar de la comunidad y al cuidado del medio ambiente.
Mirando Hacia el Futuro
Al final de la conversación, Miguel compartió su visión a largo plazo. Tiene planes ambiciosos, como establecer un laboratorio de control de calidad en la finca para seguir perfeccionando los procesos. Además, está enfocado en la transformación continua de la finca San Antonio, buscando siempre formas de mejorar tanto la producción como el impacto ambiental.
Lo que quedó claro de esta charla es que, para Miguel, el café no es solo un negocio, es una forma de vida. La finca San Antonio y Valle de Oro no solo producen café de alta calidad, sino que son una expresión del legado familiar, de la cultura salvadoreña y de un compromiso con la sostenibilidad y la innovación.